sábado, 1 de enero de 2011

Un verano del 2O1O que nunca se olvidará.~Cap2.

Ya era la hora de ir a comer, asique quité el ordenador antes de que mi madre se ponga como una furia, porque lleva media hora diciéndome que vaya y yo con el típico: voooooooooy. Y en verdad nunca voy. Bajé a la cocina, donde comíamos, me senté y todavía no estaba mi plato.
-Me llevas llamando media hora, ¿y todavía no está la comida en mi plato?
-Es que si no, no vienes, pero ya está la comida.
Me la echó en el plato, eran macarrones, me encantan los macarrones.
-Mmmm.. que rico.
-Pues cómetelo todo.
Comía yo sola porque todavía no había llegado mi padre de trabajar, y mi hermano hoy comía por hay. Menos mal. Además como me voy a la piscina tengo que hacer la digestión.
Terminé de comer y me volví a subir a mi cuarto, volví a poner el tuenti y me abrió conver Laura, mi mejor amiga, me preguntó que, que bikini me iba a poner. La verdad aún no tenía ni idea, asique la dije que no sabía aún. También la pregunté que cual se iba a poner ella, y me dijo que uno azul celeste que se acababa de comprar. Yo aún no le había visto pero seguro que era monísimo porque Laura tiene un gusto como yo, exquisito.
Abrí el cajón de bikinis y saqué los tres que más me gustaban, el rosita con lentejuelas, el rojo con corazoncitos y el amarillo a secas. Me probé los tres y al final me decidí por el rosa con lentejuelas, desde el principio sabía que me iba a poner ese pero como tenía tiempo me decidí a probármelos.
Me puse el bikini, y ahora tenía que decidirme en que pantalones cortos con que camiseta me iba a poner. Saqué el pantalón corto de piscina, con flores y me le puse. Después escogí mi camisa de tirantes negra que me realzaba un montón el pecho, por eso me gustaba tanto, y me la puse.
Tenía puesta la música en el ordenador y se me había olvidado por completo el tuenti, asique una vez vestida miré corriendo si me habían hablado. Me había hablado Laura, diciéndome el típico: eooo, estás?hola, hola!! , pobre…la había dejado sola, la contesté que me estaba vistiendo y me dijo que no pasaba nada, la dije que me viniera a recoger a mi casa a las cinco justas sin pasarse ni un minuto. Sabía perfectamente que se iba a pasar, ya que Laura nunca llega justa, ni pronto, todo al contrario, llegaba por lo menos diez minutos tarde…
Mientras la esperaba en casa, me pinté un poco, ¡hasta a la piscina había que ir pintada!, sobretodo porque iba Pablo… Me hice la raya, un poco de rímel y me eche un poquitín de pote, porque si me echo mucho se iba a notar. También me alisé un poco el pelo, aunque luego con la piscina se me iba a rizar y yo eso lo odiaba, asique metí mi nueva plancha pequeñita, que han salido nuevas en la tele. Son monísimas.
Justo llamaron al timbre, fijo que es Laura…

No hay comentarios:

Publicar un comentario